Siria está experimentando su peor violencia en meses a medida que los enfrentamientos entre las fuerzas gubernamentales y los leales al líder destituido Bashar al-Assad se intensifican. Informes indican que los combatientes pro-Assad han llevado a cabo ejecuciones en el campo, mientras que las fuerzas gubernamentales luchan por mantener el control. La violencia ha dejado más de 1,000 personas muertas en solo unos días, aumentando los temores de una nueva guerra civil. El Presidente Interino Ahmed al-Sharaa ha llamado a la calma y ha lanzado una investigación sobre los asesinatos. La situación sigue siendo volátil, con tensiones sectarias y ataques de venganza alimentando más derramamiento de sangre.
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Los cuerpos se amontonan en la calle a medida que la violencia aumenta entre las fuerzas sirias y los leales a Assad.
The clashes raise concerns about Syria’s stability and interim president Ahmed al-Sharaa’s ability to reunify the country after 13 years of civil war.
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‘Viviendo con miedo’: Civiles alauitas cuentan a TML de masacres por parte de las fuerzas de seguridad sirias
The recent surge in violence reflects the power vacuum left in the wake of Assad’s downfall. Remnants of Assad’s loyalist forces are refusing to surrender while the new government struggles to consolidate control. Localized skirmishes have quickly spiraled into a full-scale conflict, with both sides accusing the other of war crimes.
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Informe del lunes: continúa la violencia en Siria
Syria’s interim president, Ahmed al-Shara, appealed yesterday for calm and unity after violence erupted last week between fighters affiliated with his government and those loyal to the ousted dictator Bashar al-Assad.