Becky Burke, una turista británica de 28 años, ha sido detenida en un centro de inmigración de EE. UU. durante diez días después de que un problema con su visa le impidiera entrar al país. También se le negó la entrada a Canadá antes de ser llevada bajo custodia por la Oficina de Inmigración y Aduanas de EE. UU. (ICE) en el estado de Washington. Su padre ha instado a los viajeros a ser especialmente cautelosos con los requisitos de visa para evitar situaciones similares. El caso ha llamado la atención sobre las estrictas políticas de inmigración de EE. UU. y su impacto en los visitantes internacionales. Burke permanece detenida mientras su familia busca una solución.
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